Hay épocas en que todos los días parecen ser iguales. En las que siento una monotonía profunda y contínua. Que significa esto ? demasiado tiempo para pensar.
Acaso se puede pensar demasiado? En mi caso ni siquiera lo dudo. Malgasto mi tiempo y lo utilizo para pensar, tiempo que podría usar para algo más productivo como estudiar por ejemplo. Me siento en la silla frente al escritorio repleto de hojas. Muchísimo para leer. Concentrate Flor, vamos página 1. Bueno es introducción eso lo salteo. Ahora sí arranco con todo… Empiezo a leer: “Se llama proceso a la sucesión de actividades secuenciales con un objeto definido: producir el resultado dado. Este objetivo es, conducente a elaborar un producto o prestar servicio…” Listo, no me entro nada… entró por un oído y salió por el otro.
Vamos, vamos otra vez. “Se llama proceso a la sucesión de actividades secuenciales con un objeto definido: producir el resultado dado...” opa, una mosca. Moscas… es cierto, parece que traman algo malvado con esa frotada de manos. Bueno definitivamente no estoy concentrada…
Me resigno y suelto las fotocopias. Pero claro eso significa silencio, en otras palabras tiempo para darme manija un buen rato.
Debería no pensar! Y yo como hago para no pensar?, ya que si pienso demasiado me pongo paranoica y me empiezo a hacer preguntas sin respuestas. Por qué me habrá dicho eso? Qué quiso decir con eso ? Me lo habrá hecho a propósito? Y otras variantes existenciales pero también bastante inútiles. Pero también empiezo a recordar cosas del pasado y en particular personas del pasado. En qué andarán? Qué estarán haciendo ahora mismo? Se acordarán de mí? No, seguro que no. Bueno nunca se sabe lo que puede estar pensando el otro. Bla bla bla y más bla…
Y así sigue mi monólogo conmigo misma, me hago cientos de preguntas y termino con más problemas de los que tenía que hace 15 minutos antes. También con cien razones más para darle play a alguna canción deprimente y llorar, patalear y por qué no putear un poco en nombre del amor. Total es domingo y ya en sí está nublado, con lloviznas, da para estar en este estado lamentable.
Y así comienza un concierto unipersonal bastante patético, del cual el único espectador es mi perro (que por cierto no parece disfrutarlo, poniendo cumbia...): Mentirosoooooooo mentirosoooo corazon mentiroso,no tienes perdón estas loco, te vas a arrepentirrrr cuando este con otro ♫ (Léase en tonito de canto despechado).
Protagonizo una escena que parece salida de Bridget Jones, a la cual me estoy pareciendo demasiado. Canto un rato largo entre sollozos y pienso que lo único que me falta es una botella en la mano y estoy hecha una verdadera drama queen. Confieso que ese papel me queda como anillo al dedo, especialmente por estos días.
Para variar un poquito el día voy a la heladera y busco algo dulce para alegrarme. Dicen “barriga llena, corazón contento”, no me molestaría probar y si es dulce mejor. Peeeero como siempre mi heladera está vacía...
Y así termina mi día en esta racha dramática que estoy pasando. Lo positivo es que le encuentro el lado cómico a todo esto. Y sé que al fin y al cabo es todo lo que es, sólo una racha. Y como todas las rachas al igual que vienen también se van.
Y me acuerdo de que Bridget es temporal, no queremos que se quede demasiado tiempo..je.
