Foto: Sacada desde la Isla de Campeche. By me.

Acá estoy de vuelta en la ciudad (he ido a Brasil de vacaciones) y  desde donde se mire estoy hecha percha.
Son las 11pm y mis sensaciones son variadas, porque estuve varias horas adelante de este fucking monitor y tengo los ojos irritados. Sumando el calor de hoy...
Nuevo año, vida nueva...

Hoy tuve muchos cuestionamientos y añoranzas hacia ciertas personas ( ja).
Muchas veces me viene la idea de que algo salvará mi vida de una vez por todas, pero al mismo tiempo, mi pesimismo genera las ideas contrarias. Que seguiré siendo un maldito ser humano del montón  común, mediocre, una mas. Parecida a muchos, sin nada nuevo.
En este preciso momento me preguntaba en que circunstancias nos sentimos anacrónicos (fuera del tiempo). Es una opción muy valorable para vivir.

Subjetivamente también  trato de no darle mucha importancia al celular, porque éste elemento es pura y exclusivamente un invento de esta sociedad que quiere interferir cada vez más en nuestra vida privada.
Algunos van dejando el teléfono personal prendido hasta cuando dormimos. Me parece una aberración imperdonable creer que alguien puede necesitarnos a las 4 de la mañana ( si y horrendamente tambien me ha pasado de recibir llamados a la madrugada ) y por esa posibilidad, casi remota, yo tengo que preocuparme ante un sonido emitido por este atroz aparato. Aparte me aberra la idea de sentirme esclava de ese oligopolio de celulares , dependiendo de tarifas, facturas,etc, etc.
El dinero es otro elemento al cual yo admiro y respeto mucho pero también le tengo cierto rechazo, porque al ser una persona altamente buscadora de placeres, estos billetes se escapan de mis manos solo por conseguir objetos y productos que elevan mi disfrute diario y de calidad.
Las mejores situaciones que viví siempre fueron gratis, los momentos en los que me sentí fuera del tiempo real fueron pocos. Sospecho que están relacionados al amor o al enamoramiento que me generaba estar elevada de la realidad seca, común y corriente del reloj y el clima.
Creo que el arte de amar es un pequeño milagro.